DOHA.- Los Tigres juegan este jueves contra Bayern Munich en la final del Mundial de Clubes y lo principal será disfrutar cada minuto en la cancha, para jugarle de tú a tú al mejor equipo del mundo en la actualidad.
La escuadra regiomontana llega como víctima, pero el técnico Ricardo Ferretti le restó importancia por no ser favoritos, ya que tampoco lo eran contra Palmeiras, aunque los alemanes sí serán más peligrosos.
«Los brasileños hablaron ciertas cosas y nosotros salimos adelante. También eran favoritos. Nunca somos favoritos porque no nos sentimos más que nadie, eso de favorito lo pone la prensa, no los jugadores. Vamos a jugar el partido y después platicamos», dijo Ferretti en rueda de prensa.
El ‘Tuca’ apeló a la victoria de México contra Alemania en el Mundial de Rusia 2018, para motivar a sus jugadores, en un duelo en el que estuvieron tres universitarios: Carlos Salcedo y Hugo Ayala como titulares, y Javier Aquino en la banca.
Por Bayern jugarán la final Manuel Neuer, Joshua Kimmich,y Thomas Müller, quienes también estuvieron en la Copa del Mundo, mientras que Leon Goretzka, no viajó a Qatar por dar positivo de Covid, y Jérome Boateng tuvo que volver a Alemania por la repentina muerte de su exnovia.
“No hay memoria en el futbol, la última confrontación entre mexicanos y alemanes se dio en el último Mundial y a ver si se acuerdan cómo quedó el resultado”, afirmó el ‘Tuca’.
En cuanto a los recuerdos, la principal figura en el ataque de la UANL, André-Pierre Gignac, ya sabe lo que es marcarle a Neuer y buscará repetirle la dosis para ganarle la lucha por el título de goleo a Robert Lewandowski.
Tigres tiene todo por ganar en la final, si pierde será comprensible por el poderío del Bayern, incluso si es goleado, pero si gana obtendría el triunfo más importante en la historia del futbol mexicano, y con todo merecimiento tendría que ser considerado como el quinto grande.