Carlos Vela comparte inusual fotografía tomando champagne, esto pese a seguir sin equipo y con el cierre de registro de la MLS encima
A una semana de que se cierre la última puerta que tendría para jugar de aquí hasta el verano, el delantero mexicano Carlos Vela compartió una fotografía en sus redes sociales donde se le aprecia tranquilo y alegre, lo cual podría ser un indicio de estar cerca amarrar un nuevo contrato.
El ariete de 35 años lleva cerca de cuatro meses de inactividad y después de haberse cerrado los mercados de fichajes en el balompié europeo, con la Liga MX apunto de concluir su temporada regular y con otras ligas de Medio Oriente bastante adelantadas, la posibilidad de que cerrar un contrato en este momento se reduce únicamente a la Major League Soccer (MLS).
Sin embargo, hasta el momento no hay nada nuevo con respecto a una posible negociación con algún equipo.
De hecho, en Estados Unidos se menciona que un posible arreglo con LAFC ya también se vislumbra lejano.
Contrario a lo que pudiera pensarse, “La Hiena” está tranquila como lo proyecta una imagen tomada por su esposa y difundida en sus redes sociales donde se le aprecia cenando y con una copa presumiblemente llena de champagne.
Dicha imagen ha comenzado a generar la idea de que tal vez ya tiene algo adelantado que le permita extender su trayectoria, pues de lo contrario debería esperar hasta junio en busca de una nueva oferta laboral.
No obstante, otra posibilidad para Vela quizá sea verlo sumarse a variantes ligadas al balompié en tanto le surge una oferta.
Un terreno no explorado hasta el momento por el exseleccionado mexicano es el fútbol siete donde varios exjugadores se han integrado a las ligas y equipos que están en desarrollo como es el caso del mediocampista Marco Fabián.
Después de haber recorrido la legua en el balompié, el delantero quintanaroense también podría abrirse camino como embajador del fútbol de alguna institución para la cual haya jugado o bien ocupando un cargo directivo, pero parte de su futuro inmediato habrá de definirse quizá la próxima semana.