Cercanos colaboradores, su esposa Beatriz Gutiérrez, los tres hijos mayores, hermanos y el cardiólogo del Presidente Andrés Manuel López Obrador habrían sido espiados, a través del spyware Pegasus, durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, reveló el periódico británico The Guardian.
Además, también se encuentran en la lista de personajes, cuyos teléfonos fueron intervenidos:
- Dirigentes de partidos políticos
- Periodistas
- Activistas
- Diplomáticos
- Académicos
- Integrantes de la jerarquía católica
- De la hoy Jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum
El diario inglés destacó que la lista a la que tuvo acceso, incluye 15 mil personas en México consideradas de interés para espionaje entre 2016 y 2017, durante el gobierno del priista Peña Nieto.
En su reportaje, recordó que México fue el primer país del mundo en adquirir el programa Pegasus a la firma israelí NSO Group, a través de la Secretaría de la Defensa Nacional, la Procuraduría General de la República (hoy Fiscalía), y el Centro Nacional de Inteligencia (Cisen).
Detalló que una de las conversaciones privadas del entorno de López Obrador filtrada a la prensa, fue la que tuvieron Andrés Manuel López Beltrán y la exdirigente nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky, en 2017.
Mientras tanto, el gobierno peñista también mostró interés en algunas figuras de su propio partido, el Revolucionario Institucional, además de al menos 45 gobernadores y exmandatarios estatales que fueron vigilados en dicho periodo, así como el expresidente Felipe Calderón y su esposa Margarita Zavala.
Ésta última mencionó haber recibido mensajes de texto sospechosos cuando dio a conocer su postulación a la candidatura presidencial, aunque precisó que ya no cuenta con acceso al celular para someterlo a un análisis que determine si fue hackeado o no.
En declaraciones al diario británico The Guardian, Guillermo Valdés Castellanos, quien fuera director del Cisen entre 2006 y 2011, señaló que «bajo la administración de Peña Nieto, el uso de Pegasus se volvió algo salvaje.
«Tecnología como la de Pegasus es muy útil para combatir el crimen organizado, pero la total falta de verificación y equilibrio significa que fácilmente termina en las manos de privados y es utilizada para obtener ganancias personales y políticas sin tener que rendir cuentas», aseveró.
Otros clientes del spyware Pegasus se convirtieron supuestos criminales y funcionarios bajo sospecha de corrupción, además de abogados de narcotraficantes, agregó el rotativo.
Resaltó que Tomás Zerón de Lucio, entonces director de la Agencia de Investigación Criminal de la PGR, que condujo las investigaciones de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, fue uno de los firmantes del contrato con Pegasus.
De igual manera estuvieron bajo seguimiento ilegal dos integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) que colaboran en el caso Ayotzinapa, según lo dio a conocer en su momento Citizen Lab, una unidad de investigaciones de la Universidad de Toronto.
Aunado a estos dos expertos también fue espiado Melitón Ortega, tío del normalista Mauricio Ortega, quien después se convirtió en vocero del movimiento de los 43 estudiantes de la escuela Normal Rural.